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Para Giovanny, no hay obstáculos más fuertes que su fe

La voluntad de sobreponerse a las dificultades y una actitud positiva, han sido el secreto de Giovanny para salir adelante y cumplir todos sus sueños. Es verdad que la vida pone retos y obstáculos en el camino, pero saber cuáles son los objetivos y trabajar para alcanzarlos son clave para el éxito. Es así como se levanta todos los días a trabajar por su familia y a entrenar baloncesto, con la misma motivación y el amor que le pone a todo lo que hace.


Un día como cualquier otro, en el 2017, con 29 años de edad, Giovanny pedaleaba en su bicicleta, sin saber que su vida cambiaría para siempre. Cuando menos lo esperaba, fue arrollado por una tractomula que le aplastó su pie izquierdo. Unos minutos más tarde, fue trasladado al hospital, donde los médicos hicieron lo posible por salvar su pie, sin embargo, una bacteria entró a su cuerpo, generando una infección imposible de curar. Finalmente, decidieron que la mejor opción, desde el punto de vista médico, era amputarlo.


Aunque estuvo de acuerdo con la decisión por parte del equipo de profesionales de la salud, no fue nada fácil, “fue una experiencia muy dura, ya que cuando quise trabajar, todo el mundo me decía que ya no podía trabajar, que no servía y me ponían una silla para que me sentara, fue así como yo me puse a mirar y pensé: así no voy a conseguir un empleo”, comentaba Giovany, recordando su historia de 4 años atrás. Con el paso de los días, la depresión y la angustia por no conseguir trabajo y sentir que ya no servía para nada, lo condujeron a las drogas e incluso a desear la muerte, lo que llevó a sus familiares y amigos a darle la espalda, pues sin su pierna, en la calle y con las decisiones que había tomado, perdió su único apoyo.


Mientras pasaba una noche fría, lluviosa, en las calles y sin nada qué comer, sintió que no podía continuar así, por lo que buscó la manera de retomar su vida, para volver a soñar, “cuando estaba en las calles, comencé a hablar con Dios con fe y certeza de que Él me iba a cambiar y fue así como me cambió, me dio una oportunidad que no desaproveché”, agregó Giovanny, quien voluntariamente, pidió ayuda en el hospital San Juan de Dios, en Manizales, solicitando que lo internaran para su rehabilitación y así dejar atrás sus decisiones del pasado.


Una semana más tarde, gracias a la voluntad que tenía de empezar una nueva vida, salió de la rehabilitación y decidió emprender, con la esperanza de generar empleo y construir su familia soñada, “me inscribí a algo de emprendimiento con la Alcaldía de Manizales, me gané un Capital Semilla y de allí empezó un gran proyecto que me ha llevado a descubrir las capacidades y potencialidades que yo tengo”, comentó con una sonrisa llena de orgullo y satisfacción, pues además había recuperado el amor y el apoyo de su familia. Todo empezó a salir mejor de lo que esperaba, “hoy en día tengo mi negocio y vivo de él, tengo mi familia, entonces me siento muy feliz y ahí es donde uno se da cuenta de que uno puede, cualquier obstáculo desde que uno quiera lo puede superar”, agregó.


Pasó el tiempo y unos meses más tarde, recordó a una persona, que aunque no conocía, le dio una información valiosa, que tal vez, sabía que en algún momento podría servirle. Un día, mientras Giovanny se encontraba en la calle, este señor, al ver que no tenía una pierna, bajó de su camioneta para decirle, “grábese este nombre, hay una fundación que se llama Mahavir Kmina, queda en la Estrella, Antioquia y da prótesis a personas que no tienen cómo”. A partir de ese momento, tuvo la esperanza de ser beneficiado y volver a caminar por sí mismo. A pesar de que tuvo que esperar para la añorada cita, ese día, finalmente, llegó. Recibir la llamada de Mahavir Kmina fue el primer paso para empezar a cumplir su sueño de recibir una prótesis, estaba muy emocionado y aunque no contaba con los recursos, hizo todo lo posible para conseguirlos y rápidamente, se preparó para viajar. En el camino, solo se imaginaba cómo sería ese esperado momento, se preguntaba, con un poco de ansiedad, si sería capaz de volver a caminar.


Por fortuna, desde el momento en el que llegó al hogar de paso y a las instalaciones de Mahavir Kmina, todo fue mejor de lo que en algún momento imaginó. La manera en que lo recibieron llamó mucho su atención, sentía que en la Corporación, más que un equipo de gente trabajando para fabricar, adaptar y donar prótesis, era una gran familia.



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En el 2020, empezó a descubrir una nueva pasión y un talento que le permitirían ser más disciplinado, cada día más. Poco a poco, el baloncesto se fue convirtiendo en su motivación para seguir el camino hacia esa meta que se había propuesto de ser una mejor persona. Cuando se inscribió para pertenecer al equipo, conoció a personas que, así como él, han superado las dificultades para continuar con su vida. Algunos con amputaciones, otros con lesiones en la columna, todos con condiciones físicas muy diferentes, pero con algo en común, su mente positiva ante todo, para demostrar que sí se pueden cumplir los sueños. Ahora, dos años más tarde, pertenece a la selección de Caldas y junto a sus compañeros, espera competir en los siguientes Juegos Paralímpicos.


“Bueno, me falta un pie, pero entonces, si a uno le falta un pie, hay diferentes maneras de ver la vida y de salir adelante”, expresa Giovanny, para invitar a otras personas a reflexionar, convirtiéndose en el ejemplo de que con la mente positiva, todo se puede afrontar y superar. Con la misma actitud, mientras finalizaba la conversación, no dudó en agradecer, con una gran sonrisa, a quienes apoyan a Mahavir Kmina y a sus beneficiarios, “yo quiero agradecerles a todas las personas que donan a Mahavir Kmina, darles un agradecimiento especial, porque sin ellos pensarlo, con las donaciones que están haciendo, están cambiando y transformando vidas, están creando sueños, están creando ilusiones de nuevo para muchas personas, entonces pienso que es una bonita labor y les agradezco de corazón y que Dios les multiplique y les dé el doble, porque ahí es donde Dios observa todo y Él conoce lo más profundo de los corazones del hombre, entonces mil y mil gracias”.


¡Tú también puedes cambiar vidas! Si deseas hacer un aporte, ingresa a https://www.mahavirkmina.org/dona y muchas personas te lo agradecerán.


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